¡Eduquemos individuos responsables!

La educación es un acto de amor, por tanto, un acto de valor.

Paulo Freire
niña y niño caminando juntos.

Tener un hijo es el más bello regalo que la vida te puede ofrecer, pero también es una gran decisión, de la cual debes de estar muy consciente, ya que ella afecta tu vida para siempre. Es muy importante que te prepares antes de traer un niño al mundo, porque es tu responsabilidad de proporcionarle todo lo necesario para que esta nueva criatura crezca en condiciones adecuadas. Tu hijo es tu más preciado tesoro, por eso tienes el deber de educarlo y de inculcarle valores, como el amor, el respeto y la honestidad.

Un hijo es la responsabilidad de dos: el papa y la mama, pero si por alguna circunstancia te tocó educarlo a ti solo, no importa, tú tienes todas las cualidades para ser un buen padre o una buena madre, solo tienes que proponértelo. Concéntrate en su formación, conviértelo en tu prioridad. Participa en cada etapa de su vida. Sé cuidadoso con el medio que le rodea, cuida la manera como le hablas, escúchalo siempre, dedícale tiempo, felicítalo por sus logros alcanzados, nunca lo humilles por lo no alcanzado.  Enséñale que no importa cuántas veces caiga, lo que importa es nunca rendirse y siempre saberse levantar. No olvides que la atmósfera en la que se desarrolle el niño, va a influir en su autoestima.

Para darle una buena educación a tu hijo, no necesitas tener riquezas materiales. Las grandes riquezas de la vida no tienen valor material. La mejor educación que le puedes dar a tu niño es enseñarle a respetarse a sí mismo y a respetar a los demás, a valorarse y a valorar lo que la vida le ofrece.  Enséñale a que nunca le haga a nadie lo que a él no le gustaría que le hagan.  Enséñale también a cuidar el mundo en que vive, enséñale que en la vida y en la sociedad él tiene derechos, pero que, de igual manera, él tiene deberes.  Enséñale lo importante que es vivir de acuerdo a las leyes de la sociedad, enséñale además las consecuencias a las que él se expone si no respeta esas leyes. Enséñale el amor a la vida y el amor a su prójimo.  Enséñalo a servirle a la sociedad.

Educa a tu hijo con buenos ejemplos, ya que tú eres su modelo a seguir. Nunca le prohíbas hacer algo que tú tienes el hábito de hacer. Siempre que le corrijas algo, debes de explicarle la razón por la cual él no debe hacerlo.  Si tu hijo comete un error, no lo humilles, mejor oriéntalo, ya que tú eres su guía.

Padres, madres, sus hijos son sus responsabilidades, la educación de sus hijos depende de ustedes y de los valores que ustedes les inculquen en el seno de la familia. La responsabilidad del maestro es a nivel del rendimiento académico y para que este rendimiento ocurra, ustedes, papá y mamá, deben de hacer su trabajo. Trabajen de la mano con la escuela, pídanle al maestro que les informe sobre el rendimiento académico de sus hijos, así como de sus comportamientos; recuerden que ustedes y la escuela son los principales actores en la educación de los niños y los factores más influyentes en el buen desarrollo de estos, como individuo social.

Reforcemos los valores, eduquemos a nuestros hijos con responsabilidad, formemos ciudadanos capaces y útiles a la sociedad.

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